El inicio de un sueño que no sabía que tenía.

Cuando tenía 21 años, mi vida profesional era un libro en blanco. Había terminado la universidad, y aunque tenía toda la teoría en la cabeza, me faltaba lo más importante: la experiencia. Fue entonces cuando llegué a mkpro, una empresa que, sin saberlo, se convertiría en mi segunda casa.

Lo que comenzó como un año de prácticas, se transformó en cuatro años como parte de un equipo que no solo me enseñó sobre marketing, sino también sobre trabajo en equipo, superación y cómo aportar valor real a las personas. Este artículo no solo es una reflexión sobre mi trayectoria, sino un pequeño homenaje a todo lo que mkpro representa para mí.

El primer año: aprender a caminar en el mundo profesional

Mis prácticas fueron todo menos un paseo tranquilo. Desde el primer día me sumergieron en un entorno lleno de energía y dinamismo, donde cada tarea era una oportunidad para aprender algo nuevo. Recuerdo perfectamente mi primer proyecto: analizar una estrategia de contenidos para un cliente. Estaba nerviosa, pero el equipo me guió con paciencia.

Ese primer año me enseñó que el marketing no se trata solo de tener ideas brillantes, sino de entender a las personas detrás de los números y métricas. Cada reunión, corrección y aprendizaje fue un ladrillo más en los cimientos de la profesional que soy hoy en día.

Los tres años como parte del equipo: creciendo profesional y personalmente

Cuando terminé mis prácticas y me ofrecieron unirme al equipo, supe que estaba en el lugar correcto. Estos tres años han sido un viaje lleno de retos y satisfacciones. Ese día jamás me hubiese podido imaginar el recorrido que iba a tener dentro de mkpro.

Trabajar aquí significa mucho más que cumplir con tus tareas diarias. Es entender que cada cliente tiene un sueño y nosotros somos parte de su equipo para hacerlo realidad. Este enfoque me hizo replantearme lo que significa el éxito: no es solo alcanzar resultados, sino impactar de manera positiva en las personas con las que trabajas.

Aprendizajes que me llevo:

  • Comunicación efectiva: Aprendí que hablar claro y escuchar con atención son habilidades esenciales, tanto para los clientes como dentro del equipo.
  • Gestión del tiempo: Entre deadlines, reuniones y proyectos, desarrollar esta habilidad ha sido clave para mi crecimiento.
  • Confianza en mí misma: Con el tiempo, dejé de dudar de mis ideas y empecé a proponer con seguridad.

Lecciones que trascienden el marketing

mkpro no solo me ha enseñado sobre estrategias digitales, diseño web o campañas de redes sociales (entre otras muchas cosas); también me ha dejado lecciones para la vida. Aquí, entendí que el trabajo en equipo es más que dividir tareas: es apoyarnos mutuamente en los días buenos y en los no tan buenos.

Algo que valoro profundamente es el enfoque humano de mkpro. Detrás de cada cliente hay una historia, un esfuerzo, y nuestra labor va más allá de cumplir objetivos: se trata de ayudar a las personas a alcanzar sus metas.

Reflexión personal

A veces me pregunto quién sería yo sin esta experiencia. Probablemente, no habría aprendido a manejar el estrés, a aceptar que no todo sale perfecto a la primera, ni a valorar el poder de las pequeñas victorias.

A los futuros clientes de mkpro

Si estás pensando en trabajar con nosotros, quiero compartirte algo desde mi experiencia y el corazón: en mkpro no somos una agencia más, nos convertimos en parte de tu equipo. Nos comprometemos con tus objetivos como si fueran nuestros, y siempre buscamos construir relaciones basadas en la confianza y el respeto.

Al elegirnos, no solo obtendrás un servicio de marketing; obtendrás un aliado que entiende lo que significa apostar por un sueño y estamos aquí para ayudarte a hacerlo realidad.

A quienes buscan formar parte del equipo

Unirte a mkpro no solo es un paso profesional; es un viaje de transformación personal. Aquí encontrarás retos, apoyo y, sobre todo, un lugar donde crecer. Si tienes ganas de aprender, proponer y ser parte de algo más grande, este es tu lugar.

Agradecida por el camino recorrido

Hoy, con casi 27 años (mi cumple es mañana ;D), miro hacia atrás y siento un profundo agradecimiento. mkpro me ha dado más de lo que podría haber imaginado: herramientas para el trabajo, amistades que valoro profundamente y una versión mejorada de mí misma y que cada día evoluciona y crece un poquito más.

Sé que el camino no ha terminado. Lo mejor está por venir, y estoy emocionada por seguir creciendo, aprendiendo y aportando.

No puedo terminar este artículo sin hacer una mención especial a Alejandro y Francesc. Gracias por haber confiado tanto en mí desde el principio y por conseguir sacar siempre la mejor versión de mí misma. Siempre os estaré eternamente agradecida. 

Alaitz Barroco

mkpro
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.